3 de mayo de 2010

Hablando de como pierdo mi vida.

Hoy me levante a las 12:10 del mediodía soñando con cosas bizarras y con un integrante nuevo en mi cama, no, no un perfecto compañero ni algo que me dé que hacer en las noches, solo una querida amiga llamada cucaracha, que me veía como si estuviese invadiendo su espacio personal, cuando, obviamente ella invadía el mío de una manera absoluta. No sé si sea solo yo o el 99% de la población femenina que le tiene pavor a esas cosas asquerosas que están en las alcantarillas, pero no fue una visión para nada bonita notar como me observaba asustada y yo de verdad no sabía que hacer, si patearla, no moverme o volverme a dormir; luego de medio minuto con esa cosa viendome opte por patearla y salir corriendo en pánico, como cualquier chica hubiera hecho.
Baje a eso de las 12: 20 para ver que había de comer y cepillarme los dientes (como cosa rara en la parte de arriba de mi casa no hay agua, ya es costumbre, gracias Chávez o fenómeno del niño o lo que sea), nada nuevo, nada brillante, rutinario, pero hoy sentí una chispa, algo que me hizo arreglarme y colocarme bonita y ponerme perfumitos, cosa que NUNCA hago, sólo por ladilla de vivir. Salí con el ego alto y con esperanzas de que iba a ser un día brillante y emprendí camino a mi colegio. Cuando llego, naturalmente han cambiado horarios y me avisan que tengo sopotocientas horas libres y me dicen la frase que siempre me dicen cuando voy "Bárbara, ¿por qué coño viniste?" y creanme, que me he hecho esa pregunta durante todos los días del año escolar, pero es poco relevante, es el hecho de que pierdo tiempo "valioso" allí, tiempo que podría haber gastado durmiendo, existiendo, escuchando música, leyendo blogs, amargandome, pero todo en la comodidad de mi casa con aire acondicionado y un bajo índice de moscas y mosquitos y animalitos. Ya son las 5:39 pm, ya llegué hace una media hora a mi casa y sinceramente, desde la 1:oo pm que estuve allí hasta las 5:00 pm, siento que no he hecho nada con mi vida y así pierdo los días, en clases inexistentes, habladurías que se olvidan, momentos bizarros, arrecheras momentáneas y constantes pensamientos de: ¿qué coño estoy haciendo con mi vida?

No hay comentarios:

Publicar un comentario